cual mar profundo ante sus ojos de asombro
ella' sin develar frases agonizantes que lo atraerian por su exesiva compasion' deletrea mentalmente cada palabra que escapara manchada de un tinte rojo, y el' escucha con cinismo su sobervia anticipada y postrado sobre esa generosa atencion brindada por ellas otras, sonrie' más' sin ensuciar su talla decide que las palabras de ella arraiguen en el juicio de los presentes y a la ganancia del tiempo le abre una silla y otra para si,.... de el bolso cual descansaba bajo su hombro' una inquietante luz en su virtud le dibujo en animación un busto de magnificencia' tomó un cigarrillo y un presente al paso triunfo al encenderlo' misma sonrisa seria inmediatamente borrada después por un billete grande; de ella el cigarrillo este ayudóle' por su marca extravagante dejándole una buena bocada y un muy tenue secreto que su crepitar a el revelaria.
ese fue su adios".... y al cruze enfrentaron espaldas que los admirados por ella tuvieron la oportunidad tambien de ver su desnudes posterior, pero el volteo con gracia para seguirla a forma de compañia y sus bien educados protectores le vistieron sin prisa, cuando el otro volvia a principio ambas sillas despreciadas, pagaron cuentas y a ella abrieron el suntuoso portal que les guardaba.
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